EL MILAGRO DE 17 DE MAYO DE 1925

Cuando nuestro pueblo estaba atravesando una dura sequía y las cosechas se daban ya por perdidas, en el atardecer de este día ante la imagen de un Sol radiante, sale en procesión la imagen de Nuestro Padre Jesús Nazareno. 

Bajo un volteo de campanas que repicaban con fe y esperanza avanzaba la Carroza abriéndose paso entre los muchos fieles presentes. Llegada la imagen al Arrabal las nubes presentes se rompieron como a golpe de martillo dejando caer un gran cantidad de agua. El cortejo procesional se empapó de aquella agua bendita que el Señor mandaba sobre su pueblo que puso toda su fe para que se hiciera el milagro. 

El milagro fue doble al observar como la imagen que soportó toda la lluvia estaba completamente seca. Desde ese día todos los Villatobanos han sido fieles a su Patrón celebrando el 17 de Mayo con toda solemnidad la Fiesta de Acción de Gracias a Nuestro Padre Jesús Nazareno.